APARTES DE LA CARTA SOLIDARIA
HOY EN DÍA LA HUMANIDAD SE ENFRENTA CON UNOS DESAFÍOS FUNDAMENTALES
Crisis económica:
Deterioro de las economías locales o nacionales en beneficio de los grandes grupos financieros supranacionales, priorizando el capital y en detrimento del trabajo, desregulación de los mercados....
Crisis del empleo:
Paro creciente, degradación de las condiciones de trabajo, desleal competencia social, deslocalizaciones del trabajo...
Crisis social:
Reparto cada vez menos equitativo de las riquezas entre los continentes y en el seno de cada país, exclusión, aislamiento, violencia...
Crisis humana:
Falta de perspectivas de futuro, espejismo del consumismo, individualismo, pérdida de ideales...
Crisis política:
Desvalorización de la acción de los poderes públicos y de los políticos, fragilidad de la democracia y de la noción de ciudadanía...
Crisis medioambiental:
Degradación acelerada del medioambiente, acumulación de residuos, desertización, reducción de la biodiversidad, efecto invernadero...
De cara a estos desafíos, hay que construir urgentemente un nuevo modelo de sociedad y redefinir el lugar de la economía que debe ser solidaria y estar al servicio de la persona.
¿ES POSIBLE UN MUNDO SOLIDARIO?
La economía solidaria: quiere promover un desarrollo duradero integrando las necesidades de las generaciones actuales y futuras.
La economía solidaria participa concretamente en la lucha contra las causas de la exclusión y la pobreza y no únicamente sobre sus consecuencias.
En un lugar de experimentación y de promoción de nuevas formas de reparto justo de los beneficios y del tiempo de trabajo.
Tiene como objetivo favorecer la expansión de cada ser humano y permitir que cada uno equilibre lo mejor posible, a lo largo de su vida, el tiempo dedicado a la formación, a una actividad remunerada, al voluntariado y a la vida familiar o personal.
De aquí en adelante, punto de referencia a través de sus realizaciones locales, la economía solidaria es una vía alternativa y prometedora para el conjunto de la sociedad.
Está basada en la tolerancia, la libertad, la democracia, la transparencia, la equidad y la apertura hacia el mundo.
LOS SEIS PRINCIPIOS DE LA CARTA
1. IGUALDAD
Satisfacer de manera equilibrada los intereses respectivos de todas las personas protagonistas* interesadas por las actividades de la empresa o de la organización.
(* Las protagonistas: trabajadoras, empresarias, socias de la asociación o accionistas de la empresa, clientes, proveedores, comunidad local, nacional e internacional...)
2. EMPLEO
El objetivo es crear empleos estables y favorecer el acceso a personas desfavorecidas o poco cualificadas.
Asegurar a cada miembro del personal condiciones de trabajo y una remuneración digna, estimulando su desarrollo personal y su toma de responsabilidades.
3. MEDIOAMBIENTE
Favorecer acciones, productos y métodos de producción no perjudiciales para el medioambiente a corto y a largo plazo.
4. COOPERACIÓN
Favorecer la cooperación en lugar de la competencia dentro y fuera de la organización.
5. SIN CARÁCTER LUCRATIVO
Las iniciativas solidarias no tendrán por fin la obtención de beneficios, sino la promoción humana y social, lo cual no obsta para que sea imprescindible el equilibrar la cuenta de ingresos y gastos, e incluso, si es posible, la obtención de beneficios.
Ahora bien, los posibles beneficios no se repartirán para beneficio particular, sino que se revertirán a la sociedad mediante el apoyo a proyectos sociales, a nuevas iniciativas solidarias o a programas de cooperación al desarrollo, entre otros.
6. COMPROMISO CON EL ENTORNO
Las iniciativas solidarias estarán plenamente incardinadas en el entorno social en el que se desarrollan, lo cual exige la cooperación con otras organizaciones que afrontan diversos problemas del territorio y la implicación en redes, como único camino para que experiencias solidarias concretas puedan generar un modelo socio-económico alternativo.
lunes, 9 de agosto de 2010
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